Lille, un paraíso a orillas del río Deûle

Lille (también conocida como Lila en español), es una ciudad al norte de Francia, muy cercana a la frontera con Bélgica y a una hora del Paso de Calais. Lille ha sido considerada uno de los grandes emplazamientos económicos de Europa, precisamente por encontrarse entre París, Londres y Bruselas. Además, es la tercera ciudad universitaria del país, después de París y Lyon, y fue Capital Europea de la Cultura en 2004.

El río Deûle fue el principal causante de los primeros asentamientos en la zona y genera maravillosos entornos en la ciudad que merecen ser visitados. El Deûle nace en las colinas al suroeste de Lens y recorre un total de 59 kilómetros a través de la región de Nord-Pas-de-Calais y la frontera entre Bélgica y Francia.

Lille fue destruida, por segunda vez, durante los años 40 y tardó cinco años en recuperar su actividad industrial y comercial. Sin embargo, a partir de la Feria Internacional de los Tejidos de 1951, la ciudad resurgió económicamente. A finales de los años 70, la industria local sufrió una nueva crisis de la que se recuperó definitivamente gracias a la conexión ferroviaria con el TGV, en 1993, y con la inauguración del eurotúnel bajo el Canal de la Mancha, en 1994.

Éste ha sido uno de los motivos por los que Lille se ha convertido en una ciudad muy recomendable para ser visitada, puesto que permite alternar la visita con escapadas a múltiples destinos cercanos (costa sur de Inglaterra, Londres, Flandes, Valonia, costa norte francesa, Bélgica, Luxemburgo, Holanda…). Además, con el TGV, en una hora estás en París.

Curiosamente, Lille evoca a muchos de estos lugares y su cultura bebe de belgas, ingleses y hasta holandeses, por el habitual uso de bicicletas. En el casco histórico encontramos algunos de los edificios más emblemáticos, encuadrados en la famosa Gran Plaza, de evidentes influencias belgas. La plaza del teatro, con la ópera y la vieja bolsa, constituye un inmejorable ejemplo de la majestuosidad de la ciudad.

Os recomendamos que alquiléis una moto, uséis el autobús turístico u os busquéis alguna alternativa similar para poder ver la ciudad de una forma más periférica y descubrir algunas de las maravillosas zonas verdes que alberga. Si os desplazáis a las afueras podréis visitar la impresionante ciudadela, diseñada por el arquitecto Vauban cuando el rey Luis XIV conquistó la ciudad, allá por el siglo XVII.

Y si viajáis en verano, hay conciertos gratuitos en un emplazamiento cercano al boulevard Saint Jean-Baptiste Lebas, en la Escuela Nacional Superior de Arte. Los establecimientos cercanos ofrecen precios muy competitivos y el ambiente es muy agradable.

Además de todos estos atractivos turísticos, Lille posee una considerable oferta de entretenimiento, entre la que se encuentra el Casino Barrière, un casino llamativo y glamuroso en el que tiene lugar el UKIPT Lille, uno de los torneos de póker más prestigiosos del mundo. Además, podréis alojaros en el fabuloso hotel de cinco estrellas que alberga al casino, el Hôtel Barrière y, si pedís que os ponga en una planta alta, disfrutaréis de unas vistas espectaculares de la zona.

Como últimos datos de interés general, es importante anotar que Lille tiene unos 230.000 habitantes y unos 110.000 estudiantes. Aunque probablemente se trate de una exageración, suele decirse que uno de cada tres habitantes es menor de 25 años. En cualquier caso, la ciudad respira juventud y aire fresco, y los estudiantes de Erasmus la adoran porque es un emplazamiento perfecto para moverse por Europa.

Con estas recomendaciones y un poco de investigación añadida os aseguramos que esta desconocida maravilla al norte de Francia puede llegar a enamoraros. Lille es una magnífica alternativa si estáis pensando en hacer un viaje de varias paradas que involucren a París, Londres y/o Bruselas.