Que ver en Badajoz provincia

En este articulo vamos a conocer sitios que ver en Badajoz provincia, visitando su capital, algunos de sus pueblos más bonitos y más importantes lugares con naturaleza para disfrutar de una relajantes vacaciones en estas interesantes tierras extremeñas.

Que ver en Badajoz provincia

Hay muchos atractivos turísticos que ver en la provincia de Badajoz por lo que es difícil seleccionar algunos, pero para aquellos que tienen planeadas unas vacaciones en estas tierras, esta pequeña guía puede servir para conocer algunos de sus rincones más importantes, así como los pueblos más bonitos de Badajoz para visitar.

Que ver en Badajoz

La ciudad de Badajoz con actualmente unos 150.000 habitantes fue fundada por los musulmanes en el siglo IX y llegó a ser capital de un reino taifa islámico en el siglo XI hasta que la ocuparon almorávides y almohades en el siglo XII. La conquistaría definitivamente el rey leonés Alfonso IX en 1230. De la presencia musulmana queda la alcazaba de Badajoz, fortaleza de los almohades, un insigne monumento, su alcazaba, declarada Monumento Histórico-Artístico en 1931.

El conjunto de la alcazaba de Badajoz está situado en el cerro de la Muela rodeando la antigua ciudad musulmana. Al norte transcurre el río Guadiana, y al este, el arroyo Rivillas, que confluye con aquel bajo el ángulo noreste. En ambos frentes existen fuertes pendientes en el terreno que aumentan el carácter defensivo de la alcazaba, lo cual se refuerza con los fosos naturales que representan los ríos.

La fortaleza de los almohades en Badajoz es uno de esos sitios que ver en Extremadura importante. Se construyó, pues, en un lugar estratégico que controlaba el paso natural norte-sur y este-oeste, utilizando manpostería, argamasa, sillería y ladrillo. El conjunto amurallado ocupa una superficie de 400 por 20 metros, e incluye unos interesantes jardines.

Tal y como se conserva hoy, la obra fue levantada por los almohades en el XII, aunque tiene su origen en el siglo IX y se construyó al fundar la ciudad. Sirvió como morada de los monarcas de taifas durante los siglos XI y XII. El recinto acoge el Museo Arqueológico Provincial, ubicado en el palacio de los duques de la Roca (renacentista- mudéjar), también declarado Monumento Histórico-Artístico en 1962. Este es sin duda unos de los sitios importantes que ver en Badajoz capital y que no puedes dejar de visitar por su importancia histórica.

Castillo de Alburquerque en Badajoz

La villa de Alburquerque (Badajoz)  se ubica a 45 kilómetros al norte de la capital. Ya desde lo lejos, mucho antes de llegar, podemos divisar, asentada sobre un enorme roquedal, la silueta vigilante de uno de los castillos mejor conservados de España en  la frontera con Portugal.

El castillo medieval de Alburquerque que mandó remodelar en 1445 don Álvaro de Luna en un cerro de la sierra de San Pedro, declarado Monumento Nacional en 1924, y que generalmente se conoce como castillo de Luna. Alburquerque ofrece un buen número de elementos monumentales y arquitectónicos dignos de visitar (su barrio gótico está considerado Conjunto Histórico- Artístico), pero ninguno de ellos tiene tanto interés como ese magnífico castillo, uno de los sitios que ver en Badajoz provincia con más importancia histórica.

El Castillo de Alburquerque en Badajoz lo cuentan como prácticamente inexpugnable, y a juzgar por los hechos parece que así ha sido a lo largo de los siglos. Y es que todo el recinto está pensado como un entramado defensivo en que cada detalle obligaba al invasor a exponer su flanco más vulnerable.

El Castillo de Alburquerque en Badajoz, aunque no es demasiado grande, se encuentra perfectamente conservado gracias a la restauración practicada tras la Guerra Civil y es uno de los sitios que visitar en Extremadura de mayor valor. Consta de cuatro áreas defensivas, que se van escalonando a lo largo de la ladera norte del cerro sobre el que asienta, y por donde tiene la entrada desde la población.

El primer recinto es una pequeña muralla tipo Vauban, que fue construida bajo mandato portugués entre 1705 y 1716 (durante la guerra de Sucesión española). El segundo elemento defensivo es una rampa estratégicamente diseñada para facilitar el ataque sobre el asaltante, ya que en la subida dejaría al descubierto la parte del cuerpo que el escudo no cubre.

Así llegamos al patio de armas, donde resulta fácil transportarse a esa época de espadas y caballeros. Allí encontramos la iglesia de Santa María del Castillo, la cantina, el comedor, el alojamiento para la tropa, así como un aljibe perfectamente diseñado para nutrirse del agua de lluvia.

Todo ello presidido por una hermosa atalaya, la torre del homenaje, construida por don Álvaro de Luna, y cuyo acceso se encuentra en la zona más alta del castillo, la zona noble, separada de la plaza de armas por una sola puerta y defendida por un matacán que permitiría, en caso necesario, arrojar piedras y demás objetos al enemigo.

En esta parte del Castillo de Alburquerque en Badajoz , además de la torre del homenaje, donde el señor tenía sus aposentos, encontramos también la torre de los Cinco Picos (este nombre tiene que ver con los cinco vértices de su planta pentagonal), separada de la anterior por un hermoso puente levadizo, la casa del alcaide y las mazmorras. En general, sorprende la inmejorable conservación de todo el recinto. El castillo de Alburquerque era el más importante de los cinco castillos colocados estratégicamente en esta zona de la raya para defender la frontera.

Desde el Castillo de Alburquerque en Badajoz  se podía contemplar la llegada de una tropa a más de tres días de camino, así como vigilar la vecina fortaleza de Castello de Vide, construida por nuestros vecinos portugueses para controlar los movimientos de los ejércitos castellanos.

Parque Natural de Cornalvo en Badajoz

El Parque Natural de Cornalvo se localiza al este de Badajoz, a unos 18 kilómetros al norte de Mérida, ocupando una superficie de 10.570 hectáreas. Incluye el embalse del mismo nombre y su presa, una colosal obra de ingeniería construida en época romana sobre el arroyo Albarregas para abastecer de agua a Emérita Augusta, y que todavía hoy se encuentra en activo y es ta considerado Monumento Nacional, por lo que es uno de los lugares para visitar en Extremadura para lo amantes de la naturaleza.

El río Aljucén, junto con los arroyos del Muelas y de la Fresneda, son los principales cursos fluviales del parque, presentando una vegetación de ribera con un excelente grado de conservación. En cuanto a su relieve, descubrimos aquí suaves formas que únicamente se ven interrumpidas por las alineaciones montañosas de sierra Bermeja y sierra del Moro, de escasa elevación y que que conforman el límite sur del espacio. Su paisaje esta compuesto por encinares y alcornocales adehesados, que se extienden sobre un terreno ondulado, mezclándose en ocasiones con matorral de brezos, helechos y cistáceas. En las zonas de umbría se dan también el madroño, lentisco, labiérnago y torvisco.

Las orillas del embalse están flanqueadas por bosques de ribera. Colmilleja y jarabugo, entre los peces, cigüeña negra, halcón abejero, buitre negro y numerosas anátidas entre las aves, así como meloncillo y nutria entre los mamíferos constituyen lo más destacado de la fauna.

La visita al Parque Natural de Cornalvo puede realizarse a pie, en bicicleta e incluso con paquetes que permiten disfrutar del centro ecuestre. A la entrada del parque, en la dehesa boyal de Trujillanos, encontramos un centro de interpretación que facilita la visita.

Zalamea de la Serena en Badajoz

La ilustre e histórica localidad de Zalamea de la Serena en Badajoz tiene aproximadamente hoy unos 4.000 habitantes y se sitúa a 153 kilómetros al este de Badajoz. Es famosa por servir de escenario a la pieza teatral de Calderón de La Barca, El alcalde de Zalamea, escrita en torno a 1636 y uno de los pueblos de Badajoz para visitar imprescindibles.

El alcalde de Zalamea se trata de un drama de honor protagonizado por Pedro Crespo, nombrado alcalde del lugar tras ver como su hija era ultrajada por un capitán español. Haciendo uso de su autoridad, ordena ejecutar al militar, una decisión que finalmente será refrendada por el rey Felipe II.

Dejando aparte estas connotaciones literarias, sabemos que Zalamea de la Serena en Badajoz fue población romana, y que poseyó una fortaleza musulmana. Conquistada por los castellanos en 1236, dependió de la Orden de los Caballeros de Alcántara.

Posee Zalamea de la Serena en Badajoz una notable colección de edificios históricos, alguno muy vinculado a la cultura castellana. Entre ellos, el palacio del maestre Juan de Zúñiga, lugar que sirvió como corte literaria y donde a fines del siglo XV Elio Antonio de Nebrija escribió la primera gramática castellana.

Además, Zalamea de la Serena en Badajoz guarda entre sus calles restos de un monumento sepulcral romano que consisten en dos columnas sobre elevado podio, amén de un castillo, la iglesia de Nuestra Señora de los Milagros (siglo XIII), la capilla de Santo Cristo de la Quinta Angustia (notable edificio herreriano de comienzos del siglo XVII) o la supuesta casa de Pedro Crespo.

En la segunda quincena de agosto todo el pueblo de Zalamea de la Serena se vuelca en la representación popular en la calle de El alcalde de Zalamea, fiesta que se complementa con otras actividades lúdicas y un mercadillo artesanal, por lo que se convierte en uno de los lugares de interes en Badajoz muy recomendables.

Olivenza de Badajoz

El municipio de Olivenza se sitúa a 25 kilómetros al sudoeste de Badajoz. Su peculiaridad histórica radica en el hecho de que perteneció al reino de Portugal entre 1297 y 1801, año en que fue conquistada por las tropas españolas del rey Carlos IV de Borbón. Una circunstancia que hizo que durante mucho tiempo se hablara en ella una variante dialectal del portugués (el oliventino) que, hoy día, apenas se utiliza.

Además, Olivenza posee un notable casco histórico medieval en el que destaca especialmente su castillo, obra de los caballeros templarios que se remonta al siglo XIII, remodelada por los portugueses en la siguiente centuria. Esto convierte a Olivenza a uno de esos lugares que visitar en Extremadura bastante desconocido.

El casco histórico de Olivenza posee enormes torres de base cuadrada, siendo la del homenaje, con 36 metros, la más alta. En él se ubica parte de un interesante museo etnográfico, cuyas otras dependencias las encontramos en la antigua panadería real (siglo XVIII) y en la antigua cámara agraria (comienzos del siglo XX).

Entre los edificios religiosos en Olivenza de Badajoz, la maravillosa iglesia de Santa María Magdalena, de estilo manuelino (gótico tardío portugués), levantada en la primera mitad del siglo XVI, con un vasto interior de tres naves en el que asombran ocho formidables columnas torsas y una azulejería historiada típicamente portuguesa. El viajero encontrará que Olivenza es uno de los pueblos de Badajoz para visitar que más puede llamar la atención y además otros edificios, murallas y bastiones le permitirán revivir sin demasiado esfuerzo la importancia histórica de la localidad.

Jerez de los Caballeros en Badajoz

La ciudad de Jerez de los Caballeros se sitúa a 72 kilómetros al sur de Badajoz, y es famosa porque en ella nacieron conquistadores de la talla de Vasco Núñez de Balboa (que en 1513 cruzó a pie el istmo de Panamá y llegó hasta el Pacífico), Hernando de Soto (que recorrió el sur de los Estados Unidos y falleció junto al Misisipi en 1542) y otros.

Aunque se habla de una presencia fenicia, la localidad es esencialmente de origen romano. En Jerez de los Caballeros lo que más destaca es su casco histórico, declarado en 1966 Conjunto Artístico-Monumental. Las calles de Jerez son angostas y en fuerte pendiente, organizadas bajo la influencia de las numerosas iglesias, conventos, ermitas, fuentes, palacios y otros hitos monumentales, organizando una trama cuya nomenclatura resulta bien expresiva de sus características: Calzada, Corredera, Cuesta Arriba, Lagares, de los Ahorcados, y otras semejantes que configuran un conjunto toponímico extraordinariamente sugerente.

De tal manera, uno de los principales atractivos turisticos de Jerez de los Caballeros es precisamente el recorrido de su tortuoso urbanismo, pleno de panorámicas insospechadas. Estructuralmente la población se asienta sobre dos colinas que constituyen sus focos iniciales.

En una se levanta el castillo templario de origen musulmán y la iglesia de Santa María de la Encarnación, y en la otra la de San Bartolomé. En los espacios intermedios se levantó en el siglo XV la iglesia de San Miguel. Esta es el área correspondiente al casco histórico que rodea la muralla medieval. La cerca, construida en piedra y con bastantes torres de refuerzo, contaba con numerosas puertas de las que se conservan las llamadas del Burgo y de la Cilla o San Antoñito. Tiene un perímetro de unos 1.700 metros.

La iglesia de Santa Catalina surgió algo más tarde extramuros, en el barrio bajo de poniente. Componente fundamental de la población fueron las fundaciones religiosas, entre las que, además de sus cuatro parroquias, llegó a contar con ocho conventos, tres beateríos, dos hospitales y hasta veinticuatro ermitas.

En el dominio de la arquitectura señorial eran asimismo numerosos los palacios y casas solariegas de nobles fachadas timbradas por blasones, entre las que cabe recordar las mansiones de los Corregidores, Vicaría de Santiago, Martínez de Logroño y otros muchos, algunas ya desaparecidas.

Con todo, lo que mejor distingue a Jerez de los Caballeros es el inigualable conjunto de sus iglesias de torres barrocas, cuyo valor hace de esta población centro único justamente afamado y uno de los pueblos bonitos de Badajoz que bien merecen una visita. La iglesia de Santa María de la Encarnación, inmediata al castillo, se erige sobre una posible basílica visigoda de la que aún perdura una columna alusiva a su consagración a la Virgen en el año 556.

Presenta torre diferente a las otras tres, siendo su silueta la que se recorta sobre el hermoso parque de Santa Lucía cuando se divisa la ciudad desde el sur. La Semana Santa de Jerez de los Caballeros es una de las más afamadas de Extremadura, habiendo sido declarada en 1986 de interés turístico regional. Destacan en ella sus maravillosos pasos procesionales.

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